«Nel mezzo del cammin della nostra vita: La Divina comedia»
Así arranca la Divina Comedia de Dante Alighieri, una de las obras maestras de la literatura universal. Aquí te reproducimos las tres primeras estrofas
Dante recupera la tradición de considerar la vida como un camino que hay que recorrer. Este camino puede recorrerse sensata y cuerdamente, o uno puede desviarse de él, llegando, así, a esa «selva áspera y fuerte» , que es una metáfora del pecado.
No hay que olvidar que esta obra se escribió cerca del 1304, una época en que el cristianismo tenía una fuerte presencia en la vida social y cultural de Europa.
A lo largo de la obra, en sus tres cantos, Dante se pasea, primero de la mano de Virgilio, después acompañado de Beatriz, por el Infierno, el Purgatorio y el Paraíso, viendo qué resultados ha tenido, en cada caso, la vida de personajes ilustres de la historia. Hay también un eco del tópico del Ubi sunt y extrayendo conclusiones sobre cómo ha de actuar para lograr alcanzar el Paraíso (dado que lo hace de la mano de Beatriz se ven claras las referencias al tópico de la Donna angelicata, tan tratado por los autores del Dolce Still Nuovo cercanos a Dante.
«Mi planta de naranja lima» es un libro que me recuerda a mi infancia, a mi preadolescencia. La vida tan dura del protagonista, la muerte de su amigo, la crueldad del mundo que lo rodea. Recuerdo mis risas y mis lágrimas cuando leía la obra. Ha dejado una huella importante en mi historia de lectora.
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